Ni mucho think ni mucho tank

No es una reflexión sobre la música popular


En el telón de fondo que colocaron en los carnavales culturales de Valparaíso, pusieron el puño en alto, y luego la palabra ‘VENCEREMOS’, en clara referencia a la UP. Están tan locos que aún creen que ganaron. Necesitan un psiquiatra.

El Presidente el sábado inauguró un parque en Quebrada Verde dentro de los proyectos Bicentenario y sacó relucir que se levantó despertada por la muñeca gigante. Hablo de la cultura. Con todo, se olvidó de lo rota, mal educada y atorrante que fue, justamente, cuando estuvo al inició de los carnavales culturales de Valparaíso, cantando con el puño en alto y cantando una canción de barricada y tribal en el sentido que Karl Popper le da su libro ‘La Sociedad Abierta y sus enemigos’: “El Frente Popular bla, bla,bla,” y terminar con el verso “El pueblo unido, jamás será vencido”. ¿Era propaganda o una parrilla cultural que convoca sin importar las diferencias? Entre paréntesis, Julio Bazán Álvarez en su libro ‘El Pueblo lo derrotó’, recuerda que la UP obtuvo el treinta y tanto porcentaje de los votos. Entonces, ¿por qué la izquierda monopoliza el concepto de ‘pueblo’? Naturalmente, ningún medio criticó esa rotería del Presidente en presencia del dueño de casa, el alcalde de derecha, Jorge Castro, que al día siguiente manifestó su molestia: “soy respetuoso de lo que se piense y he luchado toda mi vida para que vivamos en paz, pero siento que este tipo de situaciones nos pueden llevar a divisiones odiosas que nadie quiere". No está en el ADN de la izquierda la paz, aun cuando la Bachelet financié con platas públicas el movimiento de la no violencia y contra la guerra. Lo mismo que con las pifias al grupo folclórico ‘Los Huasos Quicheros’ en el Festival del Huaso de Olmué, donde unos espectadores probablemente fueron a escuchar a Jorge Coulon de Inti-llinami y una de las canciones de Víctor Jara que cantó, entre ellas ‘El derecho de vivir en paz’. Jara parece que se equivocó de título, pues lo que creía y lo muestra su funeral son las banderas del Mir, esto es, ‘El derecho a la violencia’ en nombre de la justicia social. Hay que recordar que los grupos musicales que apoyaron a la Unidad Popular despreciaban la música del tipo ‘Los Huasos Quincheros’ o los temas folclóricos del Festival de Viña. Por tanto, también el personaje el huaso. Es como si despreciaran al gaucho de Argentina o el vaquero norteamericano. Para el colmo, eligen el mejor compositor chileno a Víctor Jara en vez de Violeta Parra o Jaime Atria u otro. Esa elección me resulta tan sospechosa como la elección de Allende que hizo TVN. El periodismo de cultura están en más interesados en la visita que realizó el diputado de derecha ‘liberal’, Cristián Mockeberg al Museo de la Memoria que comentar la rotería e inconsistencia de los grupos musicales de izquierda. Ahora bien, dichos grupos quieren hacernos creer que ellos eran sistémicos como el Rat Pack o como los rockeros clásicos de Inglaterra y USA de la década del 60 o Tom Jones. Nos quieren hacer que ellos les gustan el dinero como Mick Jagger. Simplemente, que todo era amor y paz como el grupo el Quinta Dimensión y su canción Acuario . El filósofo alemán Ernst Tugendhat dijo que él no podía leer a Nietszche por el uso que le había dado los nazis. Una experiencia parecida me pasa con eso grupos musicales de la UP, nos quieren hacer creer que ellos estaban a tono con raindrop keep falling on my head , Up, Up and AWay y Different de Mama Cass Elliot . La última canción formaba parte del repertorio musical del programa infantil “HR Puffnstuff”, en que actuaba el genial actor británico Jack Wild con su flauta habladora. Y así hablan del apagón cultural y aislamiento internacional. Ni los alemanes del Este conocían ese programa infantil.

El Presidente afirmó la semana pasada públicamente, que no había que respetar los principios del Estado de Derecho y la ley, al ser contraria a la aplicación de la Ley de Amnistía de 1978, que benefició a más de mil personas ligadas a la Unidad Popular y a los grupos terroristas “Quiero reafirmar la trascendencia de que continúen adelante los juicios sobre violaciones a los derechos humanos y la convicción que tenemos que tener todos de no recurrir a amnistía ni puntos finales que impidan que la verdad se imponga y que la justicia haga su tarea”. El Presidente está violando los derechos humanos y la ley que juró o prometió respetar. Como es costumbre en la derecha chilena nadie dice nada, ni la nueva camada de políticos menores de 35 años que llegaron al parlamento, ni siquiera el rugbista que propuso el desalojo habló. Ni siquiera los “grandes pensadores” de los thinks tanks de la derecha. Ninguna carta a los medios. Nada. Cuando rige la prescripción, la Ley de Amnistía y todos aquellos principios del Derecho que Occidente ha ido formando de a poco. Como dicen los patriotas de la India: “Los ingleses nos legaron la ley”. Compárese el silencio sepultural de la derecha con aquella que combatió a la Unidad Popular. En el libro ‘El pueblo lo derrotó’ de Julio Bazán Álvarez, encontramos varios actos en que la derecha defendía la ley. Por ejemplo, Jorge Fontaine, presidente de la Confederación y el comercio afirmó: “unir a todas las organizaciones chilenas capaces de enfrentar la marea totalitaria y dejar de lado el egoísmo, el individualismo, las actitudes cómodas y salir valientemente en defensa de la libertad y la ley, en cada oportunidad”. Los de ICARE son apenas una sombra. Así, “El Partido Nacional presentó una acusación constitucional contra el ministro de Trabajo, José Oyarce “por abuso de poder y atropellos al orden constitucional vigente”” (p.85); el presidente del Partido Nacional, Sergio Onofre Jarpa dijo: “La situación de ruina económica y el atropellamiento de la Constitución y las leyes han llegado a un punto crítico…””(p.144). En fin, ni la derecha económica ni la derecha política se ha pronunciado sobre la desigualdad ante la ley, que los Presidentes desde 1990 han quebrado el juramento de respetar la ley y la Constitución, cuando asumieron la Presidencia. Compárese, asimismo, con la nueva dirigencia del Partido Socialista, que invoca principios para no llegar acuerdos con el nuevo gobierno del Demócrata Cristiano, Sebastián Piñera. En la derecha solamente los conservadores han sido consecuentes, recibiendo estoicamente las burlas del progresismo por defender sus principios. Como en el cuento de Franz Kafka ‘Ante la ley’, la derecha le niega la ley a los militares.

Hace tiempo leí una columna del economista, consejero del think tank liberal CEP, columnista de los diarios ‘La Tercera’ y ‘La Segunda’, y finalmente, vecino del Presidente Michelle Bachelet, pues vive en la misma calle que ella en la comuna de Las Condes, Leonidas Montes en la que escribió : “¿Se ha fijado que en Alemania cada 9 de noviembre celebran la caída del muro? Nosotros seguimos exaltando el 11 de septiembre. Es como si Alemania siguiera recordando la construcción del muro” (19-11-2009). Las palabras que acabo de citar me provocaron urticaria. La encontré tibia y ambigua. ¿A quién se refiere con ‘exaltando’: a la izquierda o la derecha? Si gracias al 11 de septiembre, cayó el muro de Berlín. Habría que celebrar, porque no caímos en la esclavitud comunista ¿Para Leonidas Montes no es bueno recordarle a su vecina su pasado terrorista y totalitario leninista marxista guevarista maoísta, porque ello atenta contra ‘La Reconciliación’? ¿No es bueno recordarles a los ‘progresistas’ que no eran progresistas en la UP? Pero, sí, hay que quedarse de brazos cruzados aceptando que la izquierda nos obligue a recordar un momento de la historia de Chile.

No obstante, la derecha haber tenido una alta votación desde 1999 hasta ahora, no le llegan ni a los talones a la derecha que combatió a la Unidad Popular. Ni mucho think ni mucho tank.