Visiones
Cuando ocurrió el problema de Bolivia, yo estaba trabajando en terreno en una empresa de topografía, en la Ligua. Así que, cuando escuché que Chávez hablaba de intervenir a Bolivia, no entendía lo que pasaba. Además, estaba de espalda al televisor de la pensión. Como mi trabajo era en terreno, esto es, caminaba por predios y cerros, estaba lejos del mundanal ruido. Luego, estudie más el asunto de las provincias orientales de Bolivia. Me causo risa que los periodistas en su mayoría de izquierda mencionaran la palabra geopolítica, porque acontece que el país altiplánico proporciona gas a Argentina y Brasil A lo anterior esta el hecho de que las plantas de extracción de gas se encuentran en las provincias orientales. ¿Se habrán vuelto fascistas los periodistas? El asunto es el gas. Pero lo que nadie advierte es que las provincias orientales de Bolivia, ya eran prósperas antes de se instalaran las empresas de gas, que Evo Morales nacionalizó. Gracias a la bitácora de Rubén Benedetti supe, por ejemplo, que las personas que viven en Santa Cruz, Tarija y Pando, se fueron a esa área del país, porque hace cincuenta años, hubo otro intento socialista. Las provincias orientales no eran consideradas zonas prósperas, pues no había nada. Me acordé, entonces de lo que había leído en las ‘Riquezas de las Naciones’ y en el ‘Espíritu de las Leyes’. En el primer libro, el autor cuenta que los países más ricos de los siglos XVII eran los países bajos. No era España que recibía todo el oro y plata del Nuevo Mundo. España era pobre. De hecho, un país poderos como Inglaterra tuvo varias guerras con Holanda. Ese país no tenía oro ni plata, pero sus habitantes vivían mejor que los españoles. Los holandeses estaban obligados hacerse comerciantes para vivir, como dice Adam Smith. Lo mismo le ocurrió a los chinos de Hong-Kong en el siglo XX. Mostesquieu escribe: “la violencia y la vejación dan origen a la economía, cuando los hombres se ven obligados a refugiarse en terrenos pantanosos, en las islas, en las marismas e incluso en los escollos. Así nacieron Tiro, Venecia y otras ciudades de Holanda,” (p.276). Y Tarija, Santa Cruz y Pando.
Afortunadamente, los viñamarinos no tendremos la reunión de la Unasur. Si alguien busca un buen ejemplo de idiotismo latinoamericano es la creación de esa burocracia. A la Unasur no le importa la suerte de las provincias orientales. Leyendo los comentarios de la Revista Júpiter, una ciudadana de Santa Cruz escribe: “Al fin encuentro un sitio donde hacen una critica veraz de lo que está sucediendo en Bolivia. Vivo en Santa Cruz, zona productora de gas y es cierto, Evo Morales no nos perdona que siempre pierda las elecciones en este departamento, por ello nos quita los recursos y encima nos prohíbe las exportaciones de productos excedentarios que genera la industria cruceña. Por ejemplo, en mayo prohibió la exportación de aceite de soya, cuando en el país sólo se consume el 20% de todo lo que se produce, lo mismo hizo con el maíz, todo porque los productores de Santa Cruz no están de acuerdo con su manera de administrar el país. Lamentablemente, en América Latina están idiotizadas con la imagen del pobre indígena y se olvidan que nos está gobernando con todo el odio y el revanchismo posible. El último revocatorio lo ganó con más del 60%, pero con fraude electoral, con más de diez personas que se llamaban lo mismo o con muertos que votaban. ¿Se imaginan?, eso está sucediendo en pleno Siglo XXI”. Hasta la última columna de Álvaro Vargas Llosa fue benevolente con la Unasur, destacando solamente que el gran ganador fue Brasil. Uno de los ausentes, porque de lo contrario se notaría la hegemonía carioca. Lula prefiero usar a Bachelet. Lo mismo cabe decir los cientista políticos que tienen columnas. Además, la Unasur le ha quitado significado a las palabras ‘Democracia’ y ‘Estado de Derecho’. Basta escuchar a Bachelet, quien convocando a la Unasur pretende salvar el pellejo a Chavéz y Evo Morales, y a los gobernantes que desean emular al primero. Bajo el pretexto de salvaguardar los gobiernos electos que se transforman en tiranías como ocurrió con Hitler.
En realidad no veo la TV nacionales. Viendo un poco ‘Tolerencia Cero’ me dí cuenta que el derechista Felipe Morandé lo tienen ahí para hacerlo pebre, como dicen en Chile. Él no es luchador. Será un buen académico, pero parece que no sabe defenderse ante la embestida de Fernando Villegas y los otros izquierdistas. En efecto, en el programa Villegas repetía los clichés de la izquierda, cuando parte de la actual crisis se debe a que el Fed obligó a los bancos para certificarlos a prestar a personas que no tenían respaldo. Richard Pipes escribe en ‘Propiedad y Libertad’: “Todos los años los reguladores de la Junta de Gobernadores de la Reserva Federal califican de “deficiente” a “excelente” a los bancos, basándose en su desempeño en el cumplimiento de las normas de esta legislación”. ¿Cuál legislación? La Ley de Igualdad de Oportunidad de Acceso al Crédito de 1974, la ley de Apertura de la Hipoteca Doméstica y la Ley de Reinversión a la Comunidad de 1977. Todo por la discriminación positiva. Con ellos premian a los malos y castigan a los buenos. Villegas criticaba las crisis. Obvio, si el mundo es dinámico y no estático como le gustaría los ‘progresistas’. Si soy agricultor y pierdo mi cosecha por el frío o la sequía, naturalmente va a ver una crisis y los precios subirán de los productos perdidos. Me pregunto, cuando fue la transición de los veleros a los barcos de acero, ¿no habrán tenido una crisis los astilleros?
Leyendo al español Pablo Molina me morí de la risa cuando supe que la empresa Lehman Brothers financiaba el IPCC de la ONU y no fue capaz de prever que quebrarían. Prefiero citarlo: “Ninguno de sus ejecutivos, los mismos que "saben" cómo va a ser el clima terrestre en el 2100, pudo sospechar que tan sólo un año después de evacuado el famoso informe su empresa se iría al garete”.
Fuerzas sociales son los estudiantes y trabajadores. En cambio, no se les llama ‘fuerzas sociales’ a los transportistas, ya sea camioneros y chóferes. Hasta hace poco pensé que los pescadores caían en la categoría de ‘fuerzas sociales’. Al ministro Bitar no le gustó la protesta indefinida de los pescadores.
Escuché que la Presidenta Bachelet se pavonea de los logros sociales de los gobiernos de la Concertación en la ONU, cuando en la mañana había leído la última columna de Hermógenes Pérez de Arce , quien citando al diputado y médico oficialista, Guido Girardi, éste último sostiene que hay menos camas que durante el Gobierno Militar, aun cuando el presupuesto se ha triplicado en Salud.
La Presidenta Michelle Bachelet probó en la semana del 11 de septiembre, que a igual que Allende no es la Presidenta de todos los chilenos ¿Qué hizo? Por una parte, al Salón Blanco lo denomino Salón Blanco Presidente Allende . Eso es pisotear a la República. Después de todo hay que recordar las palabras de Allende: “Yo soy el presidente de la Unidad Popular. No soy el presidente de todos los chilenos" (Discurso en Valparaíso, 7 de febrero 1972)?”. Además, el cuadro lo pintan como burgués. No merece que un salón de la Moneda lleve su nombre. Por otra parte, que hayan colocado una placa en honor a los matones, criminales y gángster de las GAP. ¡Qué gobierno tan sectario y revanchista!
También me causo risa la última columna del rector de la Universidad Diego Portales, Carlos Peña en ‘El Mercurio de Santiago’, quien se asombró de la expulsión de José Miguel Vivanco de Human Rigths Watch de Venezuela. Si el mismo columnista en más de una ocasión ha elogiado a Hugo Chávez y sus tropelías. Hay que recordar las palabras que escribió nuestro divino Platón que nos sermonea cada domingo: “Y hay que dejar también de hacerle asco a votar por Venezuela para el Consejo de Seguridad de la ONU”. Voy a seguir un poco el estilo de la periodista Michelle Markin: “Oye Carlos Peña nadie te ha dicho que eres un estúpido”.
Sobre lo mismo. La diputada de oposición y presidenta de la comisión de los Derechos Humanos, Karla Rubilar condenó la expulsión del chileno José Miguel Vivanco. Sin embargo, se ha quedado callada sobre el arresto injusto que tiene el fiscal Alfonso Podlech, quien ha sido llevado ilegalmente a Italia. Vivanco como otras vacas sagradas de los Derechos Humanos es partidario de la persecución a los militares. Después de todo, para Vivanco como para su tocayo José Zalaquette, los terroristas de la década del setenta no violaron los derechos humanos cuando asesinaban.
Etiquetas: Bachelet, Hugo Chávez, Ley de Reinversión a la Comunidad de 1977, Salvador Allende
33 Comments:
Interpretación de la conclusión final de la UNASUR:
“La democracia se ha convertido en una prostituta, con la cual y previa una módica suma de dinero (triunfo en alguna elección, independientemente que sea mediante engaños o fraude), se puede hacer con ella lo que le de la gana.
Pase lo que pase en el cuarto, nadie podrá importunar al “cliente”, aunque se escuchen gritos desde su interior”.
En eso se ha transformado la democracia gracias a la izquierda que domina este continente.
Cristian:
Esa conclusión es para culpar a la gente que tiene dinero, y exculparlos a ellos. De acuerdo con ello, Bachelet debiera sonrojarse del gobierno de Lagos, calificado por el gobierno más corrupto de la historia de Chile, según el historiador Jocely-Holt. Sin embargo, no lo hace.
No creas, Javier. Esa conclusión revela que muchos políticos que se hacen del poder mediante elecciones, incluso engañando a la gente en sus campañas, una vez en el poder se creen con el derecho a hacer cualquier cosa que vulnere los principios de la democracia en su ejercicio por el solo mérito de haber sido electos democraticamente.
Es lo que hizo Allende, quien despreció la democracia una vez en el poder , y lo que hace Evo Morales, al aprobar proyectos constitucionales sin el quorum necesario e impidiendo el ingreso a la sala de discusión a los opositores, o enviar tropas de campesinos armados a "poner orden" en las regiones opositoras.
Según UNASUR, eso y mucho más debiera ser aceptable si el susodicho fue alguna vez "elegido democraticamente".
Contra ese concepto aberrante debemos luchar.
Un gobernante no basta ser considerado democratico sólo por haber sido electo de esta forma (de eficacia muy dudosa), sino por gobernar democráticamente.
Este concepto de democracia se parece al Estatuto Docente. Una vez que estás contratado, tendrías que realizar una masaacre para que, tal vez, te expulsen, aunque hayas hecho tu trabajo muy mal.
Cristian:
Estamos de acuerdo, tan sólo para la gente de izquierda la culpa es de los otros, y no de ellos. Sobre lo de Allende y Evo Morales, llegamos a la misma conclusión, pues lo digo en el segundo parágrafo: "Además, la Unasur le ha quitado significado a las palabras ‘Democracia’ y ‘Estado de Derecho’. Basta escuchar a Bachelet, quien convocando a la Unasur pretende salvar el pellejo a Chavéz y Evo Morales, y a los gobernantes que desean emular al primero. Bajo el pretexto de salvaguardar los gobiernos electos que se transforman en tiranías como ocurrió con Hitler."
Tú dices o la Bachelet dice 'elegido demócraticamente, yo digo gobiernos electos.
Llegamos a la misma conclusión.
Javier, es realmente buenísimo el dato de la crisis bancaria en EEUU. Es increiblemente cierto que cuando el Estado mete la mano, mete la pata.
Saludos.
Alvaro
Alvaro cuando escribí este último post y lo publique, me fuí al diario liberal español libertaddigital que publica columnista norteamericanos, ya sea conservadores, liberales y libertarios. En la última columna del afromaericano Walter Williams, él escribe:
"Muchos políticos y tertulianos afirman que la burbuja crediticia y el elevado índice de ejecuciones hipotecarias son ejemplos de un fallo del mercado, y quieren que el Estado entre en escena para rescatar a agentes de crédito y a prestatarios a expensas del contribuyente que sí maneja sus asuntos monetarios con prudencia. Estos problemas financieros no se derivan de fallos del mercado, sino del fallo del Estado. La Ley de Reinversión Comunitaria de 1977 es una norma federal que intimida a los prestamistas para obligarles a ofrecer créditos a todos los segmentos del mercado y les disuade de restringirlos a los mercados de bajo riesgo, una práctica conocida como redlining (fijar líneas rojas). El Banco de la Reserva Federal, al mantener los tipos de interés artificialmente bajos, creó incentivos a compradores y constructores para comprar y construir, dando así lugar a la burbuja inmobiliaria"
Fuente: http://libertaddigital.com/opinion/walter-williams/terca-ignorancia-45523/
Me siento orgulloso de haber coincidido con ese señor.
La izquierde distorsiona la realidad para ajustarla a su agenda y la derecha y los medios no dicen nada.
Hasta Piñera anda diciendo que Obama es "vigoroso", ignorando las barreras proteccionista que el candidato de color impondrá a Chile.
Francisco:
Sebastian Piñera nunca se ha caracterizado por su inteligencia a diferencia de su hermano José Piñera. En su escritorio Sebastian tiene una foto de Eduardo Frei padre. Y más aún, sigue repitiendo sobre 'el humanismo cristiano', que no tiene nada de cristiano. Y gracias a la receta de Maritain, fue que la DC eliminó el artículo que respetaba la propiedad privadad, pavimentanndo el camino al totalitarismo.
No le pidas peras al olmo.
Muy bueno el artículo, parte por aclararme muchas dudas que tenía respecto a Bolivia.
Sobre lo de la quiebra del Banco Lehman increible que nadie haya percibido lo que se venía.
De Tolerancia Cero me da pena Morandé las pocas agallas que tiene para defender su posición... humm... si yo estuviera ahí no dejaría títere con cabeza, te lo aseguro...
Estuve escuchando anoche en la CNN a la Bachelet, en inglés, en un debate y quedé con la boca abierta la manera de distorsionar la realidad de Chile, declarando y resaltando sus "logros"... qué logros???, me pregunto yo...
Una bofetada para los chilenos el homenaje a Allende en La Moneda....
No sé que más agregar.... hablar de la Bachelet, de verdad me descompone.
Saludos.
María Angélica:
Sin Duda.Tu eres luchadora, una guerrera. A Villegas, Guille y a Matias del Río los knockearías, sin ningún problema.
Estimados amigos:
Les pido que contribuyan con la libertad de expresion en Venezuela. Por favor coloquen un link en su pagina para Violento Television. Nuestra pagina es http://violento.tv
Tambien pueden utilizar cualquiera de los enlaces que incluyo:
La unica television libre de Venezuela
Television extrema y libre
La Television de Venezuela
Un abrazo,
Dr. Jose Lopez
Director Violento Television
Sí... sobre todo a Guillé.
Matías del Río es pan comido.
Y Villegas, seguro lo dejo callado.
Bastante variado el artículo, muchos temas.
En todo caso, lo interesante en cuanto a la crisis en Estados Unidos, ahora crisis global, es que muchos economistas (Stiglitz, Hudson, Samuelson, Skidelsky, Soros) culpan a la desigualdad económica incubada desde hace 30 años y no a la intervención estatal.
La semana pasada el economista Robert Samuelson, declaró que: enormes "recompensas inmediatas" para la crema de Wall Street, "les cegó ante los peligros a largo plazo" inherentes a los tremendos riesgos que estaban corriendo – con el dinero de otros.
Skidelsky dijo: el crecimiento económico fue más rápido y mucho más estable en la era dorada keynesiana que en la era de Friedman; sus frutos se distribuyeron más equitativamente; y se mantuvo mejor la cohesión social y los hábitos morales.
Jorge:
Según los economista liberales de la época de Keynes, cuando fue el crash de 1929, la intervención estatal a través de la New Deal alargó la crisis.
Lo que mencionas está equivocado sobre el responsable de la crisis. Te cito a otro 'analista' norteamericano,Charles Krauthammer : "Durante décadas, empezando por la Ley de Reinversión Comunitaria de 1977 de Jimmy Carter, ha existido un acuerdo bipartidista en torno al uso del poder del gobierno para alcanzar la propiedad del hogar a personas que habían sido excluidas por razones económicas o, a veces, debido a discriminación racial y étnica. ¿Existe causa más digna? Pero ello condujo a una presión enorme sobre Fannie Mae y Freddie Mac -- que a su vez presionaban a bancos y a otros agentes de préstamo -- para extender hipotecas a gente que se estaba endeudando más allá de lo humanamente posible. Eso se llama préstamos de riesgo. Ello se encuentra en la raíz de nuestra desgracia actual.
"
A algunos "viudos del socialismo", que nunca se han resignado a su fracaso, como el caso de Gómez, les brillan los ojitos de alegría con esta caida de Wall Street y las bolsas, y se apresuran a culpar al sistema neoliberal de esta situación, a la vez de intentar resucitar el estatismo como solución.
Javier, ¿Según qué economistas? Porque como dice Jorge Edwards en el País "el héroe de la economía moderna, a lo largo y lo ancho del mundo capitalista, era John Maynard Keynes".
Por qué negar que la desrregulación es factor importante en la crisis y no la intervención, considerando que sólo los bancos de depósito están supervisados por la Reserva Federal y sometidos a una regulación estricta, mientras que los bancos de inversión, sin embargo, están supervisados por las autoridades bursátiles.
Las entidades de refinanciación hipotecaria, recientemente nacionalizadas, están supervisadas por la Agencia Federal de Financiación de la Vivienda (FHFA, en sus siglas en inglés), la Reserva Federal había pedido, en varias ocasiones, un mayor control de estas entidades.
Por lo mismo, el mismo Soros dijo: sin regulaciones el capitalismo se destruirá. ¿Acaso Soros no sabe de éstas leyes?
A estas alturas es un hecho generalmente admitido que ha habido un exceso de especulación y que la supervisión del sistema financiero ha dejado mucho que desear. Como probablemente diría Amartya Sen, sólo los “tontos racionales” negarían esto.
Sin embargo, entiendo esa reacción de algunos fetichistas, que como religiosos no son capaces de aceptar ningún cuestionamiento al dogma, a la verdad.
Como dice Michael Hudson: la Escuela de Chicago es conocida por su intolerancia censoria. Lo primero que hicieron en Chile los "Chicago Boys" después de 1974 fue clausurar, por ejemplo, todos los departamentos de Economía y Ciencias Sociales, salvo en la Universidad Católica, donde habían logrado establecer "el ladrillo", es decir, la doctrina de Friedman.
A propósito, y para responderle a Cristian -aunque siempre es tan extremista- el mismo Stiglitz declaró que: "La crisis de Wall Street es para el mercado lo que la caída del muro de Berlín fue para el comunismo." Quizás que nuevo orden surja, quizás no surge nada. No lo sabemos.
¿Quién es Edwards como para conferirle algún tipo de autoridad en materia económica?
El supuesto “héroe” quedó bien sepultado gracias a la crisis de los 70's, pero los políticos no escarmientan y siguen repitiendo los errores del pasado. ¿De qué desregulación como factor importante de la crisis hablan si el mercado hipotecario es uno de los más regulados que existen? GSE con la cuantía máxima de activos, volumen total de préstamos y requisitos mínimos de capital entres otras, reguladas, Community Reinvestment Act, Reserva Federal y la expansión de crédito, Greenspan, Bernanke y Paulson, dinero fudicario, etc. etc. y aún así tienen la caradurez de culpar a la "desregulación", la misma que obliga a hacerse cargo de préstamos a personas insolventes, so pena de acusarles como racistas...
¿Crisis del mercado profetizada por Stiglitz? ¿Sabrá este señor qué es el ‘mercado’? ¿El mercado de la coacción simbólica más brutal que la física? Aunque hay algunos que ni se enteran de lo acontecido en 1989...
Ron Paul, hace cinco años!!!
Irónicamente, el Gobierno, al hacerse cargo del riesgo de impago de estas compañías, incrementa la probabilidad de un doloroso crash en el mercado inmobiliario. Esto se debe a que los privilegios de Fannie y Freddie han distorsionado el mercado inmobiliario, permitiéndoles captar un capital que no habrían podido obtener en un mercado libre. Así pues, el capital se desvía desde sus usos más productivos al mercado inmobiliario.
http://www.lewrockwell.com/paul/paul128.html
Y así fue, de la mano de keynesianos y sus cuates monetaristas de Chicago... Y todo por no leer a los austriacos.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Zoidzilla, no dejas de tener en parte razón, tal como dice José Luis Feito, probablemente "no existiría hoy una crisis financiera de tal magnitud si la Reserva Federal no hubiera mantenido los tipos de interés reales tan bajos durante tanto tiempo."
Pero lo que me pregunto, y esto tiene relación con la relación entre política y dinero...
¿Se quejaban de estas leyes intervencionistas, aquellos privados que se beneficiaban económicamente de ellas?
¿Quiénes promovieron y más aún votaron a favor de estas leyes en los Estados Unidos?
¿Acaso no había -y no hay- intereses corporativos, políticos y económicos involucrados y entremezclados en la promulgación de esas leyes?
¿No será que esos mismos intereses hacen imperioso para el gobierno salvar Wall Street y así los intereses económicos de los propios gobernantes?
Es como si a las empresas de Retail, un gobierno X, les favoreciera al permitirles ofrecer créditos a destajo, porque el Estado les cubriría las espaldas.
¿Se quejarían de la intervención estatal mientras generan ganancias? Probablemente no, pero luego le echarían la culpa ante las perdidas.
Una persona que desea obtener riquezas, sin recurrir a la agresión, mediante el intercambio de bienes, tiene dos caminos para lograrlo: uno, logrando el favor de los consumidores haciendo que ellos les prefieran y estén dispuestos a intercambiar su dinero por productos que satisfagan sus necesidades; el otro, presionando a los políticos para restringir la aparición de oferentes y lograr una posición privilegiada mediante la formación de cárteles y monopolios.
Ahora, como bien haces en admitir que el intervencionismo ES el factor importante en esta crisis ¿en qué grupo ubicamos a esos “privados que se beneficiaban económicamente de ellas”?
– Community Reinvestment Act, aprobada en 1977 con mayoría demócrata. Modificaciones de Clinton, mayoría demócrata
– Sí, los hay, los mayores beneficiados con las donaciones electorales de Freddie Mac/Fanny Mae entre otros, Obama, Dodd, la Clinton, etc. Quienes se opusieron a investigar las finanzas del conglomerado hipotecario en 2005 fueron… los demócratas. El objetivo, puramente populista, era obligar a la banca a prestar dinero para adquirir propiedades a personas que no calificaban por sus ingresos, incluso ilegales, como las hipotecas de riesgo eran clasificadas como “affordable” por FM/FM y adquiridas por éstos, en suma como eran GSE, Papi Estado –es un decir– pagaba, o sea Moya, la señora Juanita, etc. Y aquí se quejaban del DICOM.
– Sí, léase los “interesados” en salvar, políticos de ambos lados, y es que las campañas políticas no se financian solas…
– Si contestas la primera pregunta, verás que no habría quejas; que le echen la culpa al “intervencionismo estatal”, como cuentan con el privilegio de los políticos y de ellos dependería su salvación, pues lo dudo.
Desregulación ¿eh?
Ahí está el punto no considerado; la intervención estatal fue hecha bajo interes corporativos, políticos y empresariales, con el propósito de desrregular algo que estaba regulado.
La Ley Gramm-Leach-Bliley, puso fin a la prohibición –o regulación- que tenían los holdings bancarios de poseer otras compañías financieras, y que separaba la banca de inversión de la banca comercial.
Nadie -de los beneficiados en ese momento- se quejó de la intervención estatal, que en definitiva permitió la ampliación de sus mercados. Y también de sus ganancias.
Más de algún senador-empresario tenía intereses creados en alguna entidad financiera, que favorecieron la aprobación de dicha ley, que parece tiene un claro carácter de una intervención que desrregula.
La Community Reinvestment Act (CRA)
establecía la prohibición a bancos y otras entidades, de otorgar créditos sólo a los más acomodados en el mercado, sino que los obligaba a ofrecerlos a todos los grupos sociales. Es decir, –aunque nadie lo dice- se obligaba al endeudamiento a quienes en realidad no podían endeudarse. Probablemente a muchos racionales les dijeron: ¿Eres idiota o qué, por qué no tienes casa?
Aquí es clave el tema de las confianzas.
En Chile a la gente se le ofrecen créditos con 60 años de plazo pero que claramente los llevarán a la deuda y la repactación eterna.
La intervención estatal fue claramente usada para favorecer intereses económicos privados sin tomar en cuenta el paso del tiempo. El tema central es que el Estado no se debe volver un nicho para favorecer intereses corporativos o empresariales.
En este caso, claramente los intereses económicos corporativos se imbricaron con los políticos. Todos estaban ganando y nadie se quejaba en ese momento.
El Estado y el Mercado eran una sola entidad. Eso no debe jamás ocurrir, porque entonces estamos ante una plutocracia.
“con el propósito de desrregular algo que estaba regulado” ¿WTF? No insistas con la pancarta de la desregulación, que lo que se buscaba era privilegiar a unos cuantos sujetos –banca, prestamistas, adquirentes de viviendas– vaya a saber uno con qué objetivos: empresarios amañados y financistas de campañas electorales; pork-barristers; votos fáciles en la elecciones, etc. Populismo puro y duro.
La mentada ley principalmente autorizó a los funcionarios a quienes se les ha encomendado la supervisión y fiscalización del negocio de seguros de cada estado a reglamentar diversos aspectos de las ventas de seguros que realicen instituciones financieras o sus afiliadas en virtud de lo dispuesto en dicha ley federal, a establecer reglamentación para proteger al consumidor de seguros conforme a los parámetros dispuestos en la referida ley federal, y a poner en vigor la protección de la privacidad del consumidor de seguros respecto a la información personal que establece dicha ley. No hace sino reafirmar los poderes concedidos a los estados por la Ley McCarran Ferguson. Además de alentar la concentración de bancos y la absorción firmas de corretaje de bolsa, compañías de seguros y emisores de tarjetas, no se advierte en qué puede haber ayudado a la aparición de nuevos competidores. Más bien parece haber disminuido su número ¿no te parece?
Por supuesto que nadie se quejaría se te conceden un virtual monopolio e impidiendo la aparición de competidores mediante la intervención estatal, así que nuevamente te pregunto: estos empresarios ¿en qué grupo los sitúas, primero o segundo? ¿Y si cabe llamar a estos negociados como libre mercado o liberalismo?
La CRA establecía ambos a la vez: prohibía a algunos y obligaba a favor de otros, sobre todo los insolventes –más populismo–, incluso bajo la amenaza de acusarlos de racistas. Con peras y manzanas: si un almacenero fía a un cliente moroso, tarde o temprano si demora en pagarle o derechamente elude el pago, se negará a ofrecerle productos “al fiado”… a menos que una “ley” le obligue a fiarle: racista, clasista, chupasangres, llámale como quieras, pero el tipo se jugaba SU propiedad y para él es legítimo intercambiarla con quien se le da la gana, siendo libre incluso de no intercambiarla.
Por supuesto que hay gente que también miente sobre sus ingresos, que se endeuda sabiendo que no puede costearlas. De que se favorecieron a algunos privados –un toma y daca con los políticos que se traduce en donaciones electorales y votantes satisfechos– no hay duda, pero reitero la pregunta ¿cabe llamar a eso libre mercado o liberalismo?
Por eso es que es tan desafortunado como revelador de ignorancia el comentario ese de “el Estado y el Mercado eran una sola entidad”: ¿hay mercado cuando en este conjunto de relaciones de intercambio en el que interaccionan los individuos, el vecino, tú, yo –nunca dotado de corporeidad– se prohíbe la aparición de competidores? Y además relación alguna puede tener con regímenes de gobierno, llámese democracia, monarquía, aristocracia, plutocracia, etc.
Zoidzilla, creo que entramos en el plano conceptual de la discusión, puesto que claramente se buscó privilegiar a unos cuantos a base de reglamentaciones que denotan la imbricación entre intereses empresariales y divisas políticas.
También concuerdo en que esa intervención no favoreció la competencia, ni tampoco a los pequeños propietarios, al alentar la concentración de bancos y la absorción firmas de corretaje de bolsa, compañías de seguros y emisores de tarjetas. Pero a ese punto quiero llegar, en cuanto a que los grandes capitales –supuestos defensores e impulsores de la libre competencia- no tuvieron vergüenza en usar el aparato estatal para fortalecer sus empresas.
Entonces ¿Dónde situarlos, si como grandes empresarios usan el aparato estatal para sus beneficios privados? Pues son plutócratas. No son liberales y tampoco libremercadistas. Pero ¿Si no hubiera crisis y te dijera que No son liberales y tampoco libremercadistas, probablemente me dirías que soy el típico antiglobalización, anticorporación ¿O no?
De hecho, los liberales verdaderos siempre desconfiaron de las corporaciones y la concentración del poder económico, porque veían el riesgo de pasar a un gobierno de la riqueza, que es lo que en Estados Unidos se ha impuesto.
Por lo mismo, considero que no es desafortunado y menos denota ignorancia decir que el Estado y el Mercado funcionaron como una sola entidad porque estamos constatando una realidad. No estoy planteando algo conceptual y ontológico en términos estrictos.
Aunque considerando que al parecer tienes una visión austriaca del Mercado, conceptualmente podría estar errada. Pero yo concibo que el Mercado, al igual que el Estado son construcciones, no son inmanentes, no son órdenes espontáneos.
Sin embargo, y tomando en cuenta que bajo la concepción austriaca del Mercado la competencia es concebida como un proceso de rivalidad empresarial, es claro que los más poderosos económicamente en el mercado, se hicieron del poder político, y así acomodaron esas relaciones de intercambio a su favor a través del Estado. Es decir, en términos concretos construyeron un Mercado a su medida, que luego les paso la cuenta.
Quizás, lo correcto sería hablar de poder político y económico imbricados.
Jorge:
Esos empresarios que usan el aparato estatal para beneficio privado, se les llama empresarios mercantilista y no capitalista. Y los empresarios mercantilistas siempre buscan el apoyo del gobierno, para defender su empresa y no al consumidor. Contra esos empresarios es que Adam Smith escribió 'La Riqueza de las Naciones'.
Javier, eso parece más un resquicio discursivo, pero igual me gustaría que me dijeras
¿Cómo llamamos por ejemplo a las grandes empresas que en Chile por ejemplo abusan de los pequeños y medianos empresarios todo el tiempo?
¿Más aún, qué defienden esos grandes empresarios o cual es su discurso?
Jorge:
No es un resquicio discursivo, ¿por qué crees que América Latina usó el proteccionismo? ¿Por qué los agricultores de california hace lobby por la uva y el vino chileno? Esos son comerciantes mercantilistas, no capitalistas.
De hecho, a lo largo de los siglo XVII y XVIII, cada país Europeo a través de los empresarios le hacía creer al monarquía que el proteccionismo era bueno porque era bueno para el empresario, no al consumidor, cuando éste podría haber adquirido bienes de mejor calida de otro país.
Sobre tú pregunta, sólo se me ocurre es la naturaleza humana. Un conocido que fue miembro de un directorio de un empresa que le vendía al Lider u otra grande y un día nos contó de lo jodido que era negociar.
Sin embargo, también te darás cuenta que hay empresas que no le venden a los grandes como Almacenes País, Rippley o Fallabela, porque se darán cuanta que pierden. Por ejmplo, la tienda de hombre Bellota y los chalecos Snob. Cada uno de ellos tiene su mercado. No sé si venderán para el extranjero. Pienso que ellos no les venden a esas grandes tiendas, porque perderían. Y con todo, les va bien.
A veces a igual que los combate de boxeo no conviene meterse con alguien de mayor peso, a menos que haya hecho un negocio como el que hizo Bill Gates con IBM, esto es, tenga el sartén por el mando, sin que el grande se cuanta.
También hay que aplicar el sentido común y la astucia en los negocios.
Javier, no sé si decir que me das la razón, pero planteas lo que siempre he criticado: la concentración económica es peligrosa y se escuda en el discurso del libre mercado, o el liberalismo (que siguen siendo utopía).
Peor aún, es más peligrosa, si esa concentración económica da paso a una plutocracia, a la que tanto temían algunos autores liberales.
Generalmente, cuando hago esas críticas, se me acusa de comunista, extremistas y todo eso. Pero yo jamás he tenido en mi mente quitarle el quiosco a una persona, o su pequeña textil, o su empresa mediana. Sino sólo evitar que los perros grandes abusen de los pequeños, porque eso mata la iniciativa, coarta la libertad, etc.
Cuando eso no se hace, generalmente los grandes se disfrazan de liberales, democráticos, pero a la vez abusan de los más débiles, y generan formas de dominación difíciles de captar como la deuda, la repactación eterna, el no pago, etc.
Los consumidores y los pequeños propietarios quedan desprotegidos.
Una sociedad no debe permitir que alguien sea tan pobre que entonces decida venderse, como tampoco debe permitir que alguien sea tan rico como para comprar a otros. (Rousseau)
Ya hay un avance, dejamos de hablar de desregulación –ojo que su opuesto no es la intervención–. Esos “cuantos” no era tan sólo los financistas de las campañas electorales, puedes incluir a los destinatarios de las hipotecas, pero sobre todo a los populistas que pudieron quedar bien con ambos: aseguraron la cuota necesaria para mantenerse en el poder. Misión cumplida.
Quiero recalcar ese “supuesto” porque parece bastante claro que dichos sujetos para nada pueden ser considerados ‘impulsores de la libre competencia’, como bien apunta Javier, sino los típicos mercantilistas que buscan la protección de sus negocios por parte del estado. Llámalos como se te dé la gana, pero omite en lo sucesivo calificar a ello como liberalismo o libremercado. Y no es necesaria la existencia de crisis para no calificarlos como liberales, como también pueden ser opuestos al proteccionismo la globalización o el corporativismo. Un empresario –los de verdad– de esos del “primer grupo”, bien puede querer intercambiar sus productos por todo el mundo sin tener que formar parte de conglomerado alguno. Lo mismo cuando cabe hablar de gobierno de la riqueza; aún cuando sean multimillonarios, el poder que tiene cualquiera de ellos sobre mí es muchísimo menor que el que el más insignificante funcionario posee, el cual maneja el poder coercitivo del estado, y que tiene a su discreción si podré o no, o cómo podré vivir o trabajar.” Sommerville aún no me obliga a servir al estado mediante la conscripción, Piñera y Cueto aún no logran prohibir intoxicarme; Claro aun no dispone del poder para quitarme la casa en nombre del bien común o interés público. Todavía… Pero un político sí.
Por ello es que es errado señalar que mercado y estado “funcionaron como una sola entidad”; uno es un conjunto de relaciones de intercambio de los individuos, con todo lo que ello implica; el otro una entidad que se vale de la coacción para lograr sus fines y que no dispone de límite alguno. No pueden tener parecido alguno en cuanto el mercado no reconoce una mente planificadora; cosa que sí se advierte en el Estado (los redactores de sus constituciones). Asimismo, mediante el mecanismo de prueba y error evoluciona de manera descentralizada de forma continua, no así en el estado pues tal mecanismo se paraliza y no se autocorrige. Subsiste en base a la utilidad que le atribuyen los participantes (no hay cortapisas a la entrada –en presencia de utilidad– y salida de él –si ella está ausente–), mientras que en el estado la falta de voluntariedad implica una disminución de su utilidad (los “contribuyentes”). Derivado de lo anterior, los comportamientos pautados inútiles desaparecerían o tenderían a su modificación; no así en el estado en que el planificador, al imponer su voluntad a los demás mediante la violencia, consolida dichos comportamientos con la consiguiente paralización del mecanismo de prueba y error. Incluso aun cuando el actuar de cada individuo puede tener repercusiones en el mercado, nunca es lo suficientemente grande como para provocar un cambio abrupto; no así en el estado que lleva incorporado en su propia lógica constructivista la posibilidad o conveniencia de cambiar de forma unilateral sus pautas de actuación y si algún individuo dispusiera de tal poder para lograr ese tipo de cambios, estaríamos ante un caso de “mente planificadora”. Por último, en el mercado siempre está presente la autocorrección, la acción humana siempre lleva implícita la posibilidad del error, errores que pueden ser subsanados mediante este mecanismo de prueba y error que permite desechar los comportamientos inútiles; ello no ocurre en el estado con la petrificación de esos comportamientos inútiles en la medida que descoordina a los individuos mientras los dirige al fin común querido y establecido por los políticos.
Al afirmar “que los más poderosos económicamente en el mercado, se hicieron del poder político, y así acomodaron esas relaciones de intercambio a su favor a través del Estado”, claramente –sin querer– das un ejemplo –y de paso te autorespondes a la vez que me concedes la razón– sobre todos estas características que diferencian a una institución que se desarrolla espontáneamente como el mercado respecto del estado: una mente planificadora que se vale de la coacción para imponer una voluntad dirigida hacia el fin querido por los políticos, que persevera en el error y no se autocorrige. Es precisamente lo que buscan los políticos y sus motivaciones en nombre del “bien común”, preferentemente socialdemócratas a los que bien les viene Roosseau como coartada.
Jorge:
La Concentración económica se debe a las propias leyes generados por los políticos. A principios de los 90 habían varias farmacias, hoy día hay tres grandes.
Las propias regulaciones que encarecen los negocios, hacen que los propios empresarios terminen por unirse para bajar los costos.
Zoidilla: Gracias por las explicaciones.
Zoidzilla:
¿Cuáles son esos populistas en Estados Unidos? Hablemos en términos estrictos.
En Estados Unidos sólo tenemos dos coaliciones, demócratas y republicanos.
¿Cuáles fueron los populistas? Más aún ¿Cuál es el carácter o la procedencia de los gobernantes americanos? ¿Provienen del mundo partidario o de la Corporate Class?
Considerando que sólo demócratas y republicanos han gobernado dicho país y han sido, ambos, promotores de mercados libres y libre competencia en el resto del mundo, y han elevado a ese país a modelo del liberalismo y capitalismo –y muchos lo han tomado como tal- la realidad nos estaría diciendo que ambos elementos sólo serían discursos sin existencia concreta en la realidad.
Es decir, nos han vendido la pomada por años, porque entonces sólo han gobernado los mercantilistas en Estados Unidos.
Insisto, liberalismo y libre mercado serían entonces utopías. De hecho, dices “un empresario –los de verdad– de esos del “primer grupo”, bien puede querer intercambiar sus productos por todo el mundo sin tener que formar parte de conglomerado alguno” pero tampoco existe eso en la realidad.
Por ejemplo, los dineros para las campañas de los candidatos en EE.UU provenían en gran parte de empresas financieras (como la banca y las compañías de seguros), empresas comerciales (como cadenas de supermercados), empresas manufactureras (como la industria farmacéutica, que les ha ido excelente con la guerra).
El gobierno de la riqueza tiene relación a cómo las presiones económicas e intereses de los más poderosos inciden en las políticas estatales, incluso para llegar a usar el poder coercitivo a su favor (Haga la guerra presidente, que la industria de armas se beneficia).
En Estados Unidos, los fondos para las campañas proceden de aportaciones de personas que pertenecen sobre todo al 40% de renta superior del país, la Corporate Class. Es decir, existe la privatización en la financiación del sistema electoral y político, que deriva en que se discrimina a otros candidatos, y repercute en la configuración de las políticas públicas de los candidatos.
¿Cuáles son entonces los liberales en Estados Unidos? Como dije en un artículo, los únicos liberales en ese país son los Pearl Jam.
A Piñera le falta poco para hacerse del poder del Estado, y entonces aplicar sus planificaciones. Berlusconi, el político-empresario es un buen ejemplo del gobierno del dinero y cómo entonces convierte al Estado en una entidad particular. Un fiasco.
Nadie compara Estado y Mercado, ni menos establece una relación de similitud.
En cuanto a la evolución de uno u otro, eso es dudoso. No hay prueba empírica que demuestre eso, ni siquiera tu argumento popperiano se sustenta.
El Estado también ha sobrevivido siglos al igual que el Mercado, en diferentes formas, por lo que no confundas el actual sistema estatal con otras formas más antiguas. Al igual que los mercados van cambiando.
Por otro lado, aunque pareces no considerarlo, en el Mercado existen relaciones de poder muy claras, donde los más fuertes ejercen sus criterios y planificaciones a favor de sus intereses, en desmedro de los más débiles.
En definitiva, construyen reglas y prácticas, que no son inmanentes ni naturales del intercambio, sino construcciones que provienen de una mente planificadora.
Javier: Te hago la misma pregunta ¿Cuál es el origen de los políticos en Estados Unidos? ¿Son hombres del partido o provienen del mundo corporativo? ¿Quiénes se dedican a la política? ¿Acaso no son los que tienen más dinero en parte?
En cuanto a tu ejemplo de las farmacias, es muy malo.
Populismo en el sentido del político que se dedica a ofrecer soluciones a un número de sujetos a costa del bolsillo de los demás, da lo mismo el partido en que militen ¿te suena el término ‘pork-barrels? En ese sentido es que los designo a los gestores de la CRA y las modificaciones que introduce Clinton.
Segundo, “promotores de mercados libres y libre competencia en el resto del mundo” hasta por ahí no más; la prosperidad de EE.UU. en el s. XIX a pesar del elevado proteccionismo se debió a que disponía de una economía interna libre, el papel del derecho estatutario aún no era tan fuerte pues tenía como contrapeso el common law. Poco a poco en la actualidad esa economía libre ha derivado en una economía intervencionista a la vez que proteccionista. Si tú lo has tomado como modelo del liberalismo y capitalismo, repetido tal discurso y comprado la pomada, es entendible entonces la gran confusión que tienes entre libremercado y mercantilismo, el FMI, el BM y la cacha de la espada.
Para afirmar tan categóricamente que no existen ejemplos de “empresarios que no formen parte de conglomerado alguno”, basta citar a cualquier proveedor de servicios o bienes sin que pertenezca a cártel de empresarios que goce del favor del estado como por ej. un vendedor de poleras por Internet.
“existe la privatización en la financiación…” No tan rápido, es cierto que las personas aportan gran parte de los fondos de las campañas, existe también un financiamiento “público” de las campañas que cuenta con un tope, al que algunos renuncian como hizo Ron Paul. Respecto a la discriminación, bueno que quieres que haga, es SU dinero y los individuos lo destinan hacia quienes ellos estimen conveniente, incluso sería una suerte de concreción de su libertad de expresión ¿O pretenderás también confiscar el dinero de los demás para dárselo al candidato de tu preferencia? Sin embargo, el problema radica en por qué el político dispone de ese poder para poder influir en ese conjunto de intercambios que es el mercado, en tomar por la fuerza la propiedad de los demás. No son tontos los mercantilistas, apoyan a aquellos que poseen dicho poder y sugieren tal posibilidad en sus campañas.
Sería interesante conocer cual es el curioso criterio para afirmar tan tajantemente “que los únicos liberales en ese país son los Pearl Jam”. Alguna definición de libertad siquiera, más allá de discursos líricas o una mera expresión de deseos.
Te repito la pregunta ¿Sommerville puede obligarme a servir al estado mediante la conscripción; Piñera y Cueto pueden prohibir intoxicarme; Claro pueden quitarme la casa en nombre del bien común o interés público? Tú mismo has dicho “le falta poco para hacerse del poder del Estado”, pero fuera del estado ¿puede hacerlo? Lo mismo que Berlusconi.
Se espera asimismo algo más que una simple negativa –no porque lo digo yo– a la evolución del mercado, no así del estado que es un ente distinto de las instituciones en que existe una ausencia de mente planificadora. ¿Popper? Para nada, hombre, lee a Hülsmann, Jasay Mises y Hayek. La distinción radica en que el estado NO es fruto de la evolución ‘espontánea’ de las sociedades, es decir, que goce de todas las características que mencioné más arriba.
“en el Mercado existen relaciones de poder muy claras, donde los más fuertes ejercen sus criterios y planificaciones a favor de sus intereses, en desmedro de los más débiles” Y claro, como también lo hacen los “débiles” a favor de sus intereses en desmedro de los grandes, no veo cual es la diferencia. Un ejemplo sería la posición privilegiada en el mercado (en sentido diferente de privilegio concedido por el estado) de que goza Windows, debido a la preferencia de los consumidores por tal O.S. en desmedro de Linux, OSX y otros O.S.; pero en caso alguno se vale de la coacción para lograr esa “preferencia”, “reglas y prácticas, que no son inmanentes ni naturales del intercambio” pero que en el intercambio mismo tienes la libertad de rechazar, como los CLUFFS, ten en cuenta el sentido en el que está empleado la noción de “mente planificadora”, en el sentido de lograr la modificación de este conjunto de intercambios e imponer un fin común.
Ante tus planteamientos tengo algunas preguntas
¿Demócratas y republicanos entonces han sido populistas?
¿Por qué esa economía libre ha derivado en una economía intervencionista a la vez que proteccionista?
Yo no lo he tomado como modelo del liberalismo y capitalismo. Insisto el liberalismo es una utopía.
Las personas más adineradas controlan el sistema político, por qué negar eso. ¿Por qué más enciman usar dineros públicos para que puedan hacerlo, si ese dinero incluso lo aporta el que gana menos? Por otro lado, la libertad de expresión es incompatible con la exclusión.
Ante tu pregunta ¿Por qué el político dispone de ese poder para poder influir en ese conjunto de intercambios que es el mercado?
Creo que aquí entra en juego una lógica que es clara en cuanto a quienes son los “dueños del Estado” y que no tomas en cuenta y que respondes erróneamente con tu propia pregunta al decir “el problema radica en, en tomar por la fuerza la propiedad de los demás”. Pero, cómo toman por la fuerza la propiedad de otros, o quién les da ese poder para hacerlo. ¿No es acaso ese estado a manos de los mercantilistas el Estado Burgués del que Marx hablaba, donde irremediablemente se iba a llegar al monopolio?
Sería interesante también preguntarse quiénes son los que por ejemplo pagan más y menos impuestos en Estados Unidos, o por ejemplo, cuáles fueron las empresas que recibieron las concesiones a Irak y su relación con los políticos actuales, etc.
Te envío el artículo para que lo leas: http://sujetoysociedad.blogspot.com/2008/04/los-verdaderos-liberales-son-como-los.html
Ante tu otra pregunta, creo que vez las relaciones de poder de forma muy simplistas. Mi única respuesta es ¿Sabemos cuáles fueron las presiones en torno a la PDD por ejemplo? ¿Sabemos cuáles son las presiones que influyeron en torno dejar de discutir que se permitiera que los trabajadores puedan negociar colectivamente interempresas? Claramente los empresarios tienen más representación y capacidad de discreción que un trabajador en el Congreso, por ejemplo. Para que hablar del lobby a favor de ciertas leyes.
“Y claro, como también lo hacen los “débiles” a favor de sus intereses en desmedro de los grandes, no veo cual es la diferencia.”
Veo que esa opinión, proviene de una visión teórica, pero no realista de las cosas. Los débiles quiebran ante los abusos de los grandes y sabemos lo que eso implica, mientras los grandes no sufren porque siguen haciendo usufructo de otros varios débiles.
Así es, encajan dentro del accionar “populista”
Así que no lo has tomado como modelo de liberalismo ¿eh? ¿Acaso no citabas a Stiglitz apuntándote a su profecía de la caída del mercado?
“Las personas más adineradas controlan el sistema político, por qué negar eso.” Cita textual dónde aparezca algo como eso, millonarios puedes encontrar en ambos partidos, pueden influir con sus gastos, pero nunca como para afirmar su “control”, si es por eso Kerry debería haber vencido a Bush…
¿Libertad de expresión ‘incompatible’ con la exclusión? Pero si disponen de su propiedad como se les da la gana, si un contribuyente negro no quiere favorecer con SU dinero la campaña de McCain y lo PROCLAMA abiertamente ¿hablarías de exclusión? En ambos casos, no existe uso de la coacción.
Nuevamente no entendiste; ese poder para influir en ese conjunto de intercambios que es el mercado, en tomar por la fuerza la propiedad de los demás ¿cómo lo obtuvo? ¿Y por qué lo posee un político? De ahí que se allegan hacia quienes puedan hacer uso de la coacción en vez de buscar la preferencia del consumidor. Más aun si se tiene en cuenta que los intereses de estos se contraponen mutuamente entre sí, siempre será así pero no “colisionarán” mientras se mantengan en sus esferas privadas. Se advierte la intención de reducir todo a “colectivos”: conglomerado, plutocracia, etc.
¿Y sabes tú las presiones como para afirmar tan campante que “veo” las relaciones de poder tan simplistas? Con el ejemplo de los empresarios con más representación y capacidad de “discreción” vuelvo a señalar sobre aquello de los empresarios de uno u otro grupo. Además, si yo, parte de un contrato, deseo negociar individualmente con cada trabajador; o si quiero negociar con grupos de 5, 3, 10 y con Fulano de forma aislada, ¿por qué habrías de impedírmelo?
Un desarrollador de Linux, Solaris u OSX le interesa obtener la preferencia del consumidor en desmedro de los otros mencionados y Windows –por supuesto–, lo mismo que Windows respecto de éstos, nuevamente pregunto ¿cuál es la diferencia más allá de atribuir una carencia de realidad porque-lo-digo-yo? En cambio, yo si te puedo exigir pruebas de la existencia en la realidad –y no en la pancarta– de que “los débiles quiebran ante los abusos de los grandes bla bla…”. Un ejemplo –y aún así éste no bastaría como para realizar una generalización– de una quiebra debida al uso de la coacción –si ese fuera el sentido de ‘abuso’– sobre estos débiles. ¿Sabrás en qué consiste este estado de insolvencia llamado ‘quiebra’, como se origina, etc.? ¿y del término “usufructo”?
Sobre el artículo, no sé como tomarlo salvo como una fumada en buena onda o una ida de olla. Si en tu opinión, el liberalismo es una utopía ¿por qué habrías de considerar su accionar como liberalismo? Más se advierte, como bien ocurre con otros “liberales” que conceden tal calificativo hacia lo que consideren motivo de su gusto particular (Madonna, la Ellis Bextor, la Binoche, etc.): no hay definición alguna de libertad que pueda aplicarse de manera universal, simétrica y funcional, salvo una distinción que nada dice e incluso citando “ejemplos” de coacción –o coerción– como si fueran distintas categorías de aquélla, lo cual supongo que se opondrá a tantas libertades como categorías existan. Para definiciones, principios y axiomas, me quedo con Rothbard.
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