Declaración de Donald J. Trump, 45to Presidente de los Estados Unidos de América

 

Quiero primero agradecer a mi dedicado equipo de abogados y demás por su incansable trabajo respetando la justicia y defendiendo la verdad.

Mi más profundo agradecimiento también a todos los Senadores de los Estados Unidos y Miembros del Congreso que se mantuvieron orgullosamente firmes por la Constitución que todos respetamos y por los sagrados principios legales en el corazón de nuestro país.

Nuestra querida República Constitucional fue fundada en el imperio de la ley, la indispensable salvaguarda para nuestros derechos y nuestras libertades.

Es un comentario triste de nuestros tiempos el que un partido político en Estados Unidos reciba un pase libre para denigrar el imperio de la ley, difamar a las fuerzas de la ley, alentar a las pandillas, excusar a los causantes de disturbios y transformar la justicia en una herramienta para la venganza política y perseguir, poner en lista negra, cancelar y suprimir a todas las personas y puntos de vista con los que no están de acuerdo. Siempre he sido y siempre seré un promotor del inquebrantable imperio de la ley, los héroes de las fuerzas del orden, y el derecho de los estadounidenses a debatir pacífica y honorablemente los problemas del día sin malicia y sin odio.

Esta es otra fase más de la más grande cacería de brujas en la historia de nuestro país. Ningún presidente jamás ha tenido que pasar algo como esto y continúa porque nuestros oponentes no pueden olvidar que casi 75 millones de personas, el número más alto jamás logrado por un presidente, votaron por nosotros hace solo unos pocos meses.

También quiero transmitir mi gratitud a los millones de ciudadanos decentes, trabajadores, respetuosos de la ley, y amantes del país y de Dios, quienes valientemente han apoyado estos importantes principios en estos tiempos muy difíciles y desafiantes.

Nuestro histórico, patriótico y hermoso movimiento para Hacer a Estados Unidos Grandioso de Nuevo solo ha empezado. En los próximos meses tengo mucho que compartir con ustedes y espero continuar nuestro increíble viaje juntos para lograr la grandiosidad estadounidense para todo nuestro pueblo. ¡Nunca ha habido nada como esto!

Tenemos mucho trabajo por delante y pronto emergeremos con una visión para un futuro estadounidense brillante, radiante y sin límites.

Juntos no hay nada que no podamos cumplir.

Seguimos siendo un Pueblo, una familia y una gloriosa nación bajo Dios y es nuestra responsabilidad el preservar esta magnífica herencia para nuestros niños y para las próximas generaciones de estadounidenses.

Que Dios los bendiga a todos ustedes y que Dios bendiga por siempre a los Estados Unidos de América.